Fuente: Vestas
Perú se encuentra en un momento decisivo para redefinir su política energética, con un potencial eólico estimado en más de 20,000 megavatios. Esta capacidad, sumada a una ubicación geográfica privilegiada, especialmente en sus zonas costeras con vientos constantes y de alta calidad, posiciona al país ante una oportunidad estratégica para diversificar su matriz energética y reforzar su seguridad eléctrica. Así lo destaca Pierina Scavino, Country Head de Vestas en Perú.
La urgencia de esta transformación es aún mayor si se considera el papel central de la minería en la economía nacional, un sector que representa más del 10% del PBI y cerca del 60% de las exportaciones. Las operaciones mineras demandan grandes volúmenes de energía, y su sostenibilidad futura dependerá, en gran medida, de contar con fuentes limpias, estables y competitivas. En este contexto, la energía eólica emerge como un aliado fundamental, no solo como soporte industrial, sino también en las estrategias de descarbonización y mejora de la huella ambiental del sector.
Desafíos en la transición energética
Si bien en los últimos años la transición energética en América Latina ha mostrado avances desiguales, Perú recién está dando pasos firmes. La reciente modificación normativa para promover un desarrollo más eficiente del sistema eléctrico es positiva, pero persisten desafíos clave.
Uno de los principales obstáculos para el despegue de la energía eólica es la infraestructura. La instalación de aerogeneradores requiere rutas adecuadas, logística especializada y una mejor conectividad al sistema eléctrico nacional. Además, el costo del transporte marítimo y terrestre en el país sigue siendo una barrera que encarece los proyectos frente a sus equivalentes regionales.
Otro punto crítico es la tramitación de permisos y el acceso a terrenos. Los procesos administrativos extensos y la falta de previsibilidad generan incertidumbre en desarrolladores e inversionistas. Para capitalizar al máximo el recurso eólico, es imprescindible modernizar los procedimientos, agilizar las autorizaciones y actualizar la normativa para facilitar la incorporación de nuevas tecnologías.
Oportunidades únicas para Perú
A pesar de estas barreras, las oportunidades para Perú son inigualables. Diversificar la matriz energética no es una opción, sino una prioridad. Actualmente, cerca del 40% de la electricidad nacional proviene de fuentes hidroeléctricas, altamente vulnerables a las variaciones climáticas. En este escenario, la energía eólica representa una alternativa robusta para fortalecer la resiliencia del sistema eléctrico, reducir la dependencia de fuentes contaminantes y mitigar los efectos de fenómenos como El Niño.
La transición energética también puede potenciar la competitividad de la minería peruana en el ámbito global. Las grandes compañías mineras ya están integrando criterios ESG (ambientales, sociales y de gobernanza) en sus cadenas de valor, y los consumidores internacionales exigen minerales producidos con una baja huella de carbono. En este contexto, una matriz energética más limpia se convierte en un activo estratégico para mantener el liderazgo de Perú en la producción de cobre, zinc, plata y otros minerales críticos para la transición energética mundial.
El país cuenta con los recursos naturales, el conocimiento técnico local y una creciente voluntad en el sector público y privado para avanzar hacia un modelo más sostenible. Si se logran remover los obstáculos actuales, Perú tiene el potencial de convertirse en un referente regional en energías renovables. El viento ya sopla a favor del país; la tarea pendiente es transformar ese vasto potencial en una política energética de largo plazo, con una visión integral y multisectorial.
Acerca de Vestas: Vestas es la compañía global líder en energía sostenible. Diseña, fabrica, instala y mantiene aerogeneradores en todo el mundo, con 189 GW de capacidad instalada en 88 países. Gracias a sus capacidades de Smart Data y 155 GW de turbinas operadas y mantenidas globalmente, Vestas utiliza una gran cantidad de datos para interpretar, pronosticar y optimizar el rendimiento eólico, ofreciendo las mejores soluciones. Junto a sus clientes y más de 35,000 empleados, Vestas proporciona soluciones energéticas sostenibles para promover un planeta limpio y un futuro más prometedor.

















