
Fuente: Rumbo Minero
Foto: Mining Weekly
La minera canadiense desiste de arbitraje ante la CCI y suspende demanda bajo el TLC con Canadá.
La minera canadiense First Quantum Minerals (FQM) anunció este lunes su decisión de retirar la demanda de arbitraje presentada ante la Cámara de Comercio Internacional (CCI) contra el Gobierno de Panamá por el cierre de la mina Cobre Panamá.
La compañía, que solicitaba una compensación de 20.000 millones de dólares, también ha decidido suspender el arbitraje que planeaba presentar en el marco del Tratado de Libre Comercio (TLC) entre Canadá y Panamá.
En un comunicado, First Quantum indicó que la decisión fue tomada “tras conversaciones con los asesores legales del Gobierno de Panamá” y reafirmó su compromiso con el diálogo.
“La compañía reitera su compromiso con el diálogo con el Gobierno de Panamá y con ser parte de una solución para el país y el pueblo panameño”, destacó la empresa minera.
El conflicto legal por la mina Cobre Panamá
La controversia sobre Cobre Panamá comenzó en noviembre de 2023, cuando la Corte Suprema de Justicia de Panamá declaró inconstitucional el contrato entre el Gobierno y Minera Panamá, subsidiaria de First Quantum.
A pesar de que el Gobierno panameño había renovado la concesión en octubre de 2023, la decisión judicial provocó una ola de protestas en el país, con cuatro muertos y pérdidas económicas de 1.700 millones de dólares.
El fallo de la Corte Suprema obligó al Gobierno a ordenar el cierre de la mina y a preparar un plan para su desmantelamiento, lo que llevó a First Quantum a iniciar procedimientos legales en diciembre de 2023.
Cobre Panamá, ubicada a 120 kilómetros al oeste de la Ciudad de Panamá, comenzó su producción en 2019 y es considerada una de las mayores minas de cobre de Centroamérica. Su cierre marcó un punto de inflexión en la relación entre el Estado panameño y la inversión extranjera en el sector minero.
Un giro en las negociaciones
La decisión de First Quantum de abandonar la disputa legal representa un cambio en la estrategia de la compañía, que hasta ahora había defendido su derecho a operar la mina y buscaba una compensación multimillonaria.
Si bien la empresa ha dejado claro su interés en negociar con el Gobierno panameño, todavía no se han revelado detalles sobre las posibles alternativas en discusión.
El futuro de Cobre Panamá sigue siendo incierto, y el desenlace de este conflicto podría tener un impacto significativo en la industria minera del país y en la percepción de los inversionistas internacionales sobre la seguridad jurídica en Panamá.