Fuente: Rumbo Minero
El sector minero peruano consolida su apuesta por la infraestructura de procesamiento. En el primer trimestre de 2025, la inversión en plantas de beneficio alcanzó los US$ 220 millones, lo que representa un incremento del 3.6% en comparación con el mismo período de 2024. Este dinamismo subraya la importancia de estas instalaciones en la cadena de valor minera, según el Boletín Estadístico Minero (BEM) del Ministerio de Energía y Minas (MINEM).
Solo en marzo, la inversión en este rubro ascendió a US$ 81 millones, marcando un crecimiento mensual del 33.7% frente a febrero y posicionándose como una de las cifras más dinámicas recientes. Esta cifra representa el 21.9% de la inversión minera total nacional, que en dicho mes ascendió a US$ 5,002 millones. Las plantas de beneficio, encargadas de la trituración, molienda y concentración de minerales, se afianzan así como pilares estratégicos del sector.
En el primer trimestre de 2025, la inversión minera total sumó US$ 1,059 millones, con un aumento interanual del 4.6%. De los siete rubros monitoreados por el MINEM, las plantas de beneficio destacaron con un crecimiento del 19.2% respecto al mismo período de 2024, siendo uno de los cinco rubros que registraron una variación interanual positiva.
Líderes de inversión y capacidad operativa
Entre las empresas que lideraron la inversión en plantas de beneficio se encuentran Sociedad Minera Cerro Verde (US$ 50 millones), Compañía Minera Antamina (US$ 36 millones) y Chinalco Perú (US$ 34 millones). Estas tres compañías concentraron más del 54% del total invertido en este segmento durante el primer trimestre, evidenciando la relevancia de los grandes proyectos en la industria minera nacional.
Por regiones, Moquegua encabezó la inversión minera total en el primer trimestre de 2025 con US$ 103 millones, seguida por Arequipa (US$ 74 millones) y Áncash (US$ 71 millones). Estimando una participación promedio del 20.8% del rubro de plantas de beneficio, se calcula que estas tres regiones canalizaron más de US$ 87 millones hacia esta infraestructura clave en el período.
A marzo de 2025, el MINEM reporta más de 180 plantas de beneficio operativas en todo el país. Estas instalaciones, que abarcan desde la pequeña hasta la gran minería, se ubican principalmente en regiones como Arequipa, La Libertad, Moquegua, Áncash e Ica. Su capacidad de procesamiento varía desde 30 toneladas diarias hasta más de 40,000, como en los casos de Cerro Verde o Las Bambas. En conjunto, la capacidad instalada nacional supera las 500,000 toneladas por día, según datos de la Asociación Nacional de Minería.
Tanto para el MINEM como para los gremios mineros, la inversión en infraestructura de procesamiento es crucial para aumentar la recuperación de minerales, reducir el uso de insumos contaminantes y mejorar la eficiencia en los procesos. Además, estas plantas generan valor agregado en origen, fortalecen la recaudación tributaria en las regiones mineras y contribuyen al desarrollo descentralizado.
El crecimiento sostenido de la inversión en plantas de beneficio refleja no solo un proceso de maduración industrial, sino también un compromiso concreto con una minería más limpia, moderna, eficiente, con mayor impacto regional y, sobre todo, sostenible.
















